Pasee por el muelle de Santa Mónica al atardecer, con el inmenso sol que se oculta en el Pacífico, y es probable que se pregunte si puede haber algo mejor que eso.
Puede ser. En primer lugar, hay un parque de diversiones llamado Pacific Parkemplazado justamente en el muelle de Santa Monica, que tiene montañas rusas no tan terroríficas y juegos de ferias tradicionales que les gustará a los más pequeños. Luego está la vista incomparable desde la vuelta al mundo ubicada en el muelle, que funciona con energía solar. Use la excursión autoguiada basada en una aplicación para explorar el muelle, que data de 1909: descubra cómo se construyó el muelle originalmente para cubrir una línea de aguas residuales (afortunadamente, ese rol se eliminó de manera gradual durante la década de 1920) y cómo el famoso diseñador de carruseles Charles Looff ayudó a desarrollar el icónico parque de diversiones.
También puede encontrarse con los placeres más simples (una malteada cremosa o un simple collar de conchas de mar) en los puestos de comida y las tiendas de chucherías que se encuentran junto al muelle. Además, hay pescadores locales que le agregan color a la escena. Para obtener más información sobre esos peces vaya debajo del muelle (directamente debajo del carrusel) al atractivo Heal the Bay Aquarium (anteriormente, el Acuario del muelle de Santa Mónica), donde encontrará alrededor de 100 especies de peces y animales acuáticos, y muchas exhibiciones educativas para la familia, incluidos los divertidos tanques abiertos para los niños.
Y, por supuesto, hay playa, una amplia extensión de 5,6 kilómetros de arena color amarillo claro que cubre la costa. Puede alquilar sillas, sombrillas y equipos, como bicicletas y tablas de paddleboards en Perry’s on the Beach; incluso ofrecen un servicio estilo VIP de “mayodormo” para que arme su lugar en la playa y le traiga comida, bebida y protector solar.